Los cambios sociales, económicos y políticos que tuvieron lugar en 2019 impactaron en el comportamiento del mercado inmobiliario, lo que pone al sector frente a nuevos retos que deberá enfrentar en 2020 para evolucionar a la par de las demandas del mercado y ofrecer oportunidades de inversión.
Algunos indicadores del sector inmobiliario en México demuestran que el precio de los inmuebles para uso residencial incrementó 8.4%. A nivel Latinoamérica registró una tendencia al alza debido a inversiones de empresas, tanto transnacionales como locales. Especialistas estiman que este año se desenvolverán en un escenario positivo debido a las tasas fijas y plazos accesibles de financiamiento; dos factores fundamentales que detonarán la demanda de propiedades de nivel medio y residencial por parte de quienes buscan invertir en un patrimonio.
Retos del sector 2020
El mercado inmobiliario 2020 deberá enfocarse en desarrollar proyectos que ofrezcan rendimientos competitivos contra los que generan ciertos productos financieros, para llamar la atención de inversionistas que buscan alternativas para mantener su capital en movimiento y obtener buenos rendimientos.
Ante el escenario de incertidumbre que nos invade debido a la emergencia sanitaria que se está desenvolviendo, la industria de bienes raíces, especialmente los bienes comerciales, serán afectados por el flujo de capital, inversión o deuda. Las empresas desarrolladoras deberán mantener sus finanzas estables y mejorar su oferta para recuperar la confianza de inversionistas.
Áreas de oportunidad para el sector
Es cierto que el contexto económico internacional actual se muestra complejo e impredecible, sin embargo, se proponen programas de crédito para incentivar el rubro inmobiliario, con el que se espera un incremento en la compra de propiedades para finales de este año; el INFONAVIT y la Asociación de Bancos presentaron un programa: Crédito INFONAVIT + Crédito Bancario, en apoyo a personas que alguna vez estuvieron activos, pero que actualmente se encuentran desempleados, utilizando el saldo de subcuenta con el que cotizaron. Según datos INFONAVIT existen 32.2 millones de derechohabientes no activos, con lo que de este programa se espera una derrama económica de 20 mil millones de pesos como medida para estabilizar el mercado inmobiliario ante la situación económica actual.
Por mencionar otro aspecto relevante sobre los créditos de INFONAVIT otorgados, se ha notado un incremento en la adquisición de propiedades por parte de personas de alrededor de 29 años, desde 2016 a la fecha. La generación Millennial representa el principal comprador de inmuebles y actualmente es beneficiario de 50% de los créditos otorgados por INFONAVIT. Este grupo de edad constituye hoy 46% de la fuerza laboral del país, que continúa creciendo. En 2020, 63% de quienes adquieran una casa serán de esta generación.
Este dato resulta relevante al momento de invertir en bienes raíces, pues nos habla de a quién a dirigir la renta y reventa de propiedades adquiridas. Es bien sabido que dicha generación tiene nuevas necesidades, y en materia de arrendamiento y adquisición de inmuebles, buscan estar cerca del trabajo, se interesan por tener cerca vida nocturna, centros sociales, restaurantes, centros comerciales, supermercados; priorizan la seguridad, minimizar el uso del automóvil, pues optan por opciones de transporte sustentables, y sobretodo, por ser de las generaciones más educadas de la historia, estudian a fondo la plusvalía.
Así mismo, para posicionarse dentro de la oferta y demanda de inmuebles en 2020, el reto para particulares, empresas, inmobiliarias e inversionistas es que deberán seguir el camino de comercialización vía plataformas digitales, que pronto se han convertido en el canal favorito para iniciar el proceso de compra de bienes raíces.
Debido a su estabilidad, las inversiones inmobiliarias pueden generar hasta un 30% de ganancia durante el año posterior a su adquisición. Estos rendimientos se dan en función del tipo de inmueble, su ubicación y valor que ofrezca el proyecto.
Dentro de la amplia oferta inmobiliaria, el segmento residencial es el más conveniente para proteger el capital y obtener altos rendimientos, ya que, por sus características y valor agregado, es el que ha registrado mayor apreciación en el mercado inmobiliario.
De acuerdo con el informe “Real Estate 2020. Construyendo el futuro”, se estima que en 2020 el costo promedio de los bienes inmuebles será 55% mayor que en 2012; esto depende en gran medida del valor agregado que ofrezca el desarrollo, integrando características particulares del segmento residencial moderno como: diseño arquitectónico, funcionalidad del espacio interior, exclusividad, ubicación (plusvalía de la zona), espacios comunes y amenidades (gimnasio, club, salón de usos múltiples, etc.), tecnología e infraestructura sostenible.
En este sentido, al momento de invertir en uno u otro desarrollo, resulta importante tomar en cuenta las necesidades de los futuros compradores y cómo los capitales intangibles suman plusvalía a tus bienes raíces. Éstos son analizados en el estudio que se encuentra abajo, descárgalo haciendo clic.