Erguida a 225 metros sobre el nivel de calle, la Torre Mayor es considerada uno de los rascacielos más resistentes del mundo y ostenta el tÃtulo del más alto del paÃs.

Terminado en 2003, este proyecto significó para la ingenierÃa nacional un reto de innovación en ingenierÃa sÃsmica, al soportar temblores de hasta 9.0 grados en la escala Richter gracias a sus 98 amortiguadores.Â

Estructura del edificio e ingenierÃa sÃsmica
La Torre Mayor está ubicado en el lÃmite entre las zonas sÃsmicas II y III, siendo esta última -por definición del Reglamento de Construcciones del Distrito Federal – la zona sÃsmica más fuerte. De allà que este proyecto exceda el Reglamento de Construcción de Ciudad de México, que incluye requerimientos sÃsmicos que se encuentran entre los más rigurosos del mundo. De hecho, en caso de que se repitiera un terremoto como el ocurrido en 1985 en esta ciudad, el edificio solamente se moverÃa como si estuviera siendo sujeto a vientos de 32 Kilómetros por hora.

Criterios del diseño estructural
La superestructura del edificio es principalmente una estructura de acero. Las columnas en el interior y el perÃmetro de la Torre son mixtas, de acero estructural, recubiertas de concreto reforzado en la primera mitad de la Torre, para añadirles rigidez y fuerza en forma económica. La planta tipo consta de una losa de sección de tres pulgadas de espesor y está compuesta de cimbra metálica perdida e integrada a la sección estructural conectada vÃa pernos de cortante. Las losas más gruesas se usan para los pisos mecánicos y techo para llevar altas cargas y mejorar el aislamiento del ruido. Las columnas metálicas de la Torre están recubiertas en concreto hasta el perÃmetro del piso 30 y hacia arriba hasta el piso 35, en el área del núcleo.

El proyecto cuenta con una estructura de cuatro niveles subterráneos para parqueaderos, ubicando el más profundo a 15 m por debajo del nivel de banqueta. Un sistema de losa plana con concreto reforzado y columnas mixtas (columnas de acero recubiertas de concreto) es utilizado para la estructura subterránea. La cimentación para la Torre es una combinación de sistemas conformado por pilas y losas. El edificio esta basado en pilas de hasta 1.50 m de diámetro llegando al estrato duro o depósitos profundos hasta 40 m, existentes debajo de la capa de depósitos de suelo suaves tÃpicamente encontrados en Ciudad de México. El sistema de losa de cimentación de concreto reforzado conecta todas las pilas y al muro de cimentación de 800 mm. de espesor en el nivel más bajo de los sótanos.

El diseño incorpora un grado de redundancia para asegurar la acción uniforme bajo las más severas fuerzas sÃsmicas. El grosor de la losa de concreto varia de 1m a 2.5 m bajo las columnas del núcleo principal de la Torre donde la concentración de carga es mayor. Los paneles de muro milán están especificados para el proyecto debido a la pobre condición del suelo y al alto nivel freático. El muro milán de 600 mm. fue colocado previamente a la excavación y está incrementado por un muro de acompañamiento de 200 mm. que fue colocado durante la construcción de la estructura subterránea. La capacidad de rigidez y carga de las columnas de la Torre se incrementa mediante un recubrimiento de concreto reforzado hasta la mitad de la Torre donde las demandas de rigidez y esfuerzo son mayores. El recubrimiento de concreto en las columnas del núcleo se extiende cinco niveles arriba de las columnas perimetrales para no crear un repentino cambio en la rigidez de los niveles intermedios.

El edificio también está diseñado para resistir las cargas de vientos como se especifica en el Reglamento de Construcciones del Distrito Federal. Un factor adicional de seguridad y comodidad para los ocupantes fue asegurado mediante una prueba de túnel de viento. El resultado de esta prueba produjo información detallada sobre las cargas de viento al recrear un microclima del sitio.
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